Por Jesús A. Galindo Noriega
Enero de 2023
Al cierre de 2022, mientras las familias de ciudad Juárez cenaban en el calor de sus casas, a la espera del nuevo año y en la mesa se platicaba la carestía de la canasta básica en las tiendas, a causa de la inflación de precios que se siguen inflando, en otras mesas, adentro del Centro de Reinserción Social estatal número 3 (el CERESO) ubicado en ciudad Juárez, se terminaba de fraguar el plan de escape de reos de una banda, fuga que ocurrió en las primeras horas de 2023, que terminó con la fuga de 30 reos y 17 muertos entre reclusos y custodios, y el cese de 2 funcionarios estatales.
La situación económica entra con zosobra en el año 2023. El anuncio del presidente López Obrador con el incrmento del salario mínimo en un 20 %, no termina de serenar la preocupación que se siente ante la inflación de los Estados Unidos ni de la depresión que amenaza a sus mercados, que inevitablemente tiene impacto en la economía de México y en el ánimo de los mexicanos. La desconfianza del incremento salarial recae en el alto riesgo de una espiral inflacinaria, ya no importada de otros mercados, sino con origen en el manejo de la politica monetaria en México. El razonamiento consiste en que los negocios no van a absorver el incremento del salario, como suele suceder por principio de negoocios, los costos se van a trasladar al consumidor final de productos y servicios, así la lógica, el temor es que los precios se incrementen de entrada un 20 % sobre los precios que cerraron en el 2022. Además de ese endoso al consumidor, el incremento nominal y no necesariamente real, produce propensión al consumo, es decir, los consumidores tienden a gastar más con la sensación de contar con mayor capacidad adquisitiva. Y puede ser así, considerando la reducción de tasas de retención de impuestos a los trabajadores para compensar la inlfación que practicamente cerró en 15% en 2022[1].
Pero no hay que regatear el esfuerzo del presidente por mejorar el salario mínimo de los trabajadores, la intención es buena aunque quizas no es oportuna ni bien orquestada, le faltó metodo para armonizar los alcances. En el estado de California de los Estados Unidos, desde el año 2017 se planeó un incremento al salario mínimo de los trabajadores, para pasar paulatinamente de los $10 usd por hora a los $15.50 en 2023[2].
Enero de 2023, tambien entró con un tipo de cambio a favor del peso mexicano, no solamente no se devaluó, sino que en las primeras semanas la moneda mexicana ha ganado unos centavos a su favor, propiciado por mayor inversión directa en México y por un flujo rompe record de remesas que llegaron desde los Estados Unidos principalmente a las familias mexicanas, pero también es factor del tipo de cambio, un dólar depreciado debido a la inflación y otras amenzas al mercado norteamericano.
En el caso de México, conviene que un aumento al salario mínimo se acompañe con reducciones al impuesto sobre la renta (ISR) de los contribuyentes, una tasa menor del impuesto que para 2023 sigue siendo del 35% para el mayor de los límites inferiores de ingresos para personas físicas y morales, les permite a los empleadores mayor solvencia y liquidez para su capacidad de operación, evitando que todo el costo del nuevo salario a sus empoleados se cargue al consumidor final en los precios de mercado, entonces si se logrará un aumento real al poder adquisitivo de los trabajadores, mientras no sea así, el aviso es solo fachada.
Antes de cerrar.- Demasiado peligro lo que sucede con regularidad en las líneas del metro de la CDMX, y más peligroso la irresponsabilidad de denunciar sabotaje, es como denunciar auto flagelo del gobierno capitalino para justificar la intervnción de la Guardia Nacional en las estaciones.
[1] https://www.marca.com/claro-mx/actualidad/2022/12/30/63af2275e2704e07708b45f1.html
[2] https://www.telemundo52.com/noticias/local/aumento-salario-minimo-california-2023/2358536
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