Por: Dr. José Eduardo Borunda Escobedo.
Este mes de agosto es crucial en la reconformación de la agenda electoral que tiene como principios básicos garantizar los principios rectores de lo que será el proceso eleccionario del 2018. Por un lado, los diputados locales tienen en sus manos el pulir cada etapa del proceso que se antoja por demás complejo por la numeraria de candidatos, partidos políticos y alianzas que surgirán en los próximos meses.
La reforma electoral debe estar lista antes que finalice el mes, pero tiene que pasar por la aprobación de los cabildos… lo cual se antoja complejo ya que pudiera haber piedritas en los municipios de Juárez, Chihuahua y Parral.
La reforma, según nos cuentan fuentes al interior de los grupos parlamentarios, tendría candados insalvables para candidatos independientes y así el pastel, bajo esta lupa, se repartiría entre los propios partidos políticos.
También el cuestionamiento del cómo harían en los casos que quieran ser reelectos los gobernantes actuales, no hay claridad e incluso se tendrían que formar consejos ciudadanos en caso de ayuntamientos o bien que los suplentes entren en funciones (para eso fueron elegidos).
En el caso de los independientes, no se sabe el cómo. Lo único que si es que deben ser electos bajo la misma fórmula es decir, bajo el principio de “candidatos independientes” y no por partido político.
Otra de las tareas pendientes son la renovación de los comités municipales de los partidos. En el caso concreto del PAN en Juárez, dicha renovación correspondería hasta octubre, pero para esas fechas sería muy tarde hacer un cambio y pudieran perder los controles que el ejercicio del poder genera.
Además tendrían que nombrar representantes de partido ante los órganos electorales como las juntas distritales del INE y preparar la logística para la selección de candidatos a los diferentes cargos (9 diputados por los distritos electorales locales, 4 diputados federales, 11 regidores y un presidente municipal con sus respectivos suplentes y además un síndico municipal) que dan una sumatoria de 26 perfiles idóneos.
En el caso del PRI, los nombres mencionados en este espacio en la entrega pasada fueron alterados ya por el calor de la sucesión deseada. Por un lado se bajaron nombres y se sumaron otros. Por ejemplo, nos comentan que Adriana Fuentes si busca una candidatura pero como Senadora. Laura Domínguez levantó la mano para dirigir los destinos de los tricolores en esta frontera.
Sin embargo, las voces se han inclinado por Luis Murguía y muy cerca suena también el nombre de Antonio Andreu. Sin descartar más nombres, seguirían vigentes José Luis Canales de la Vega, Adriana Terrazas, Alfredo Curiel, Nora Yu Hernández y Luis Fernando Rodríguez Giner. Es decir, los grupos políticos estrían haciendo sus alianzas ya que saben que pueden respaldar a esos 26 candidatos y candidatas con sus respectivos suplentes que pueden dar la lucha y sacrificarse por la comunidad y claro por una muy buena dieta.
Los otros partidos políticos no se quedan atrás. Considerando los resultados del año 2012, MORENA tiene las posibilidades de alcanzar buenos resultados, siempre y cuando sumen (como en todos los casos) buenos candidatos que atraigan votos y no resten al proyecto de Andrés Manuel López Obrador.
En Chihuahua, en el año 2012, López Obrador no saco una votación significativa, por eso la apuesta por Ciudad Juárez que puede ser la diferencia a nivel nacional y que en ese año fue la segunda fuerza política. Un resultado favorable en los cargos de diputados no está fuera de toda lógica y menos aumentar el número de regidores en la planilla de ayuntamiento.
También, en este mes se integrarán los consejos locales del INE a nivel nacional. En Chihuahua, este órgano tendrá un papel en la vigilancia de los comicios locales y hasta puede que atraiga la elección si es que el partido en el poder solicita la intervención de la autoridad electoral, pues es prácticamente (el INE) quien capacita los funcionarios electorales y tienen un papel predominante durante todo el proceso electoral.
El tiempo avanza y las fechas se irán cumpliendo, así la agenda una vez iniciada, no va a parar sino hasta agosto del próximo año y en caso de alguna impugnación terminaría hasta octubre del 2018. En conclusión, la sucesión presidencial arranca formalmente en este mes y con ello las demás elecciones constitucionales. Todo es posible.
TIMING POLÍTICO.
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