Por: Raúl Ruiz
Los he escuchado.
La pandemia movió la sensibilidad de los hombres del poder económico.
Han sido muchos meses de menoscabo. Las utilidades bajaron casi a cero. Sostenerse no fue fácil.
En general, todo el sector empresarial, pero más los del sector maquilador.
Crear y aplicar los protocolos de sanitización, para reducir el contagio del Covid, fue el primer impacto de la gran conmoción pandémica.
Sostener el salario del personal en momentos críticos cuando el semáforo rojo ordenaba cierre total por tiempo indefinido, fue mortal.
Fueron momentos clave que llevaron a la reflexión; pues la mente empresarial no es ociosa.
El retorno a la producción fue largo. Lapso que aprovecharon para buscar nuevas perspectivas para el futuro mediano.
Por ejemplo: hablemos de proveeduría.
El punto de referencia es que sólo el 3% de los insumos a la industria maquiladora los proporcionan empresas locales. Todo llega del exterior.
¿Por qué ocurre eso? Son muchos los detalles técnicos y administrativos que se exigen en el sector maquilador.
Desafortunadamente el micro empresario que intenta colocar su servicio o producto en este sector, requiere de inversión y tiempo para ser aceptado como proveedor.
Esta formación la va adquiriendo dando tumbos por la vida y no siempre exitosamente.
Hoy, ya se comienzan a desplegar criterios empresariales con más visión.
En el afán de tener al trabajador motivado durante muchos años de alta productividad, se vislumbra un interés de capacitación en preparativos post jubilatorios.
¿Como qué?
Preparar e incentivar profesionistas de 50 a 60 años para que se integren a equipos multidisciplinarios y con su experiencia, creen empresas proveedoras.
Ese es un primer rasgo humanista/empresarial. Ir creando sus propios cuadros de abastecimiento y suministro.
A eso se le conoce como MRO: «Maintenance, Repair, and Overhaul” o Mantenimiento, Reparación y Revisión.
Servicios que fácilmente se pueden obtener aquí, sin necesidad de traerlos desde el extranjero.
Por cierto, aprovecho para comentar que tendremos en Juárez la Expo MRO del 13 al 15 de octubre, en su décima edición. ¿Dónde? En complejo Polanco.
Comercial aparte, retorno a mi análisis.
La pandemia no ha sido del todo nociva. Ha despertado el lado humanista del sector maquilador.
No sólo piensa ya en términos productivos.
Ahora piensa más en la protección y la salud de sus empleados.
Hemos visto el gran interés que han dado a la aplicación de la vacuna.
Es claro que si el trabajador está sano y tiene estímulos, produce más.
Aplauso a los directivos de las maquiladoras que piensan con visión. La pandemia obliga a cambiar los paradigmas.
Se percibe nuevamente la afección con la sociedad.
Ciudad Juárez es ya, por mucho, la frontera con mayor porcentaje de vacunados en segunda dosis.
Por nosotros los juarenses no será que permanezca cerrado el acceso a los EU.
TIMING POLITICO.
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